“Mi mamá casi se me va viendo la semifinal. Ella se emociona mucho, y ese partido fue muy difícil pues lo ganamos con un gol de oro faltando un minuto para irnos a los penales”. Cuenta el profe Samuel Gaviria mientras recuerda ese partido que le ganaron a la selección danesa, y que les daba el paso a la final donde derrotaron a los noruegos 2 a 0 para coronar a Colombia como campeón del mundial de rugby subacuático el pasado 3 de agosto.