En el Centro de Formación Avanzada Juan Duns Scoto OFM. se realizó el martes 5 de marzo la Tertulia ´Interculturalidad y formación’ a cargo del invitado internacional Fray Aquilino Castillo Álvarez OFM., representante legal de la Custodia de Tierra Santa para España y experto en relaciones islamo-cristianas de la Universidad Hebrea de Jerusalén. 

El evento contó con la presencia de las directivas y de algunos asistentes de la Universidad, así como con frailes de diferentes lugares de Colombia, quienes disfrutaron de una tertulia participativa, en la que se abordó la cronología histórica y las relaciones entre catolicismo e islamismo en los procesos de interculturalidad y formación.

Hablamos con Fray Aquilino sobre lo que significa la Comisaría de Tierra Santa, el diálogo interreligioso entre san Francisco de Asís y el sultán de Egipto Melek-el-Kamel y la promoción de la paz.

¿Qué significa la Comisaría de Tierra Santa?
“Se usa la palabra comisaría que en nuestra lengua en español queda un poquito rara porque pensamos al comisario como alguien que lleva una estrella, dos pistolas a los lados y es americano. En realidad, comisaría nace del nombre italiano comisario que es el comisionado y son los comisarios de Tierra Santa en toda América Latina, porque llevan una comisión adelante, son representantes de La Custodia de Tierra Santa, de la presencia que tiene la Orden Franciscana custodiando los santos y los lugares; su papel aquí en todas las naciones americanas, como en las europeas, asiáticas y africanas es la de informar y dar a conocer ¿Qué es la Tierra Santa? ¿Qué es el peregrinaje? ¿Para qué sirve el peregrinaje pastoral, espiritual? ¿Cómo viven las comunidades cristianas en Tierra Santa?

También encuentran soporte económico, por ejemplo, para mantener los colegios que tenemos en Tierra Santa que tienen entre 15 mil y 20 mil alumnos y colegios donde hay musulmanes y cristianos, porque es muy importante la educación bajo la tolerancia y el respeto a los demás. La tierra fue declarada islámica y musulmana desde que se creó el estado de Israel, los judíos son muy celosos en cuanto a la tierra, de esta forma la comunidad cristiana quedó reducida en la ciudad vieja de Jerusalén y en la medida en que se casaban los pobres, las casas eran cada vez mas pequeñas porque los pagos se les debía a las casas.

Los comisarios también buscan inversiones para que nosotros podamos construir casas nuevas que se dan en régimen de alquiler normalmente entre 1 dólar y 50 dólares -$3.000 y $155.000-, pero para que los cristianos puedan vivir también damos trabajo en las escuelas y en las casas de peregrinos que son como hoteles. Educación, vivienda, trabajo son los tres derechos inalienables de la persona, son los que tenemos en la declaración de los derechos humanos, pues todo esto depende de los comisarios que recogen la colecta de Viernes Santo y en misas para celebrar los santos lugares, que también a través de la revista de Tierra Santa difunden la palabra de Dios y las noticias de allí en todos los territorios del mundo”.

En el marco de la celebración de los 800 años del diálogo interreligioso entre san Francisco de Asís y el sultán de Egipto Melek-el-Kamel, ¿qué significado tiene para hoy este encuentro alrededor del diálogo interreligioso y la promoción de la paz?
“Es muy importante, como dijo Fray Marcelo en su conferencia, porque ha sido un hito en la historia; ese encuentro es una epopeya entre dos personas que son creyentes y que van a encontrarse propio en la fe, no en un intercambio comercial, no en un intercambio bélico, no en una guerra, sino que van a hablar de fe, como la siente cada uno en el Dios que es igual para ambos y yo creo que este es el signo que está en la cabeza de Francisco. Cuando digo creo quiero decir que afirmo, este es el signo que está en el papa Francisco, en la mezquita y en la Universidad de Al-alzhar en El Cairo, cuando se reunieron en Abu Dabi para firmar este documento importantísimo sobre la declaración de paz entre ambas religiones, por eso este encuentro entre san Francisco y Melek-el-Kamel es muy importante porque sirve como signo para todos los encuentros sucesivos, incluido el último encuentro entre el papa Francisco y el Imán de Al-alzhar, entonces me parece que ese signo es lo que marca el calendario de encuentro interreligioso de diálogo, donde dejamos aparte cultura, negocios, enfrentamientos, radicalismos y guerras, para encontrarnos como creyentes y hablar de paz, para mí eso es sencillo".

Para terminar, ¿esta celebración qué desafíos representa para los jóvenes de hoy?
“Yo creo que esta celebración para todos ellos tiene que ser una toma de conciencia; vivimos en una globalización que ya es consumada, vivimos en un intercambio de culturas y de lenguas, porque los pueblos ya no viven dentro de un marco nacional. Podemos encontrar paisanos nuestros en todas las naciones del mundo, la religión católica, la ortodoxa-cristiana-ortodoxa e incluso los grupos y sectas, evangélicos, protestantes y el islam mismo esta globalizado, por lo tanto tenemos que encontrar caminos de diálogo sincero que nos permitan construir un mundo muchísimo mejor, socialmente, reconociendo la igualdad entre el hombre y la mujer, la igualdad entre todos los seres humanos, buscando siempre que tengamos unas economías sostenibles, respetuosas por el medio ambiente, que no creen bolsas de pobreza ni gente explotada para que otros puedan vivir de una forma muy rica. En los medios todo es noticia en el mundo, porque todo se encuentra en las redes, los jóvenes tienen que prepararse para poder vivir en un mundo que está cada vez más globalizado y tiene que aprender a tender la mano y de nuevo el signo de Francisco y Melek-el-Kamel, el santo y el sultán que se tienden ambos la mano para encontrarse a dialogar; este es el punto clave, el eje de todas estas jornadas y es que la juventud aprenda a dialogar, un mundo cada vez más y más global, en el que verdaderamente hay intercambios comerciales y de toda índole, eso es lo más importante”.